
Varios medios insisten en proponer de nuevo a sus lectores falsos misterios y recurrentes fantasías de conspiración sobre el secuestro de Aldo Moro. Ocuriò tambièn en el manifiesto el pasado 2 de agosto. Con motivo del cuadragésimo aniversario de la masacre de Bolonia, un artículo de Tommaso di Francesco y un discurso de Saverio Ferrari hacen referencia al tema, aunque no tenga nada que ver con el tema abordado. Nos referimos, en particular, al siguiente pasaje «… Catracchia, el administrador de la cuenta del Sisde de los edificios en via Gradoli, donde en el número 96 estaba el antro de las Brigadas Rojas alquilado por el ingeniero Borghi, alias Mario Moretti, donde Aldo Moro estuvo inicialmente preso».
Es una afirmación sin fundamento que lleva al lector a creer que haya un vínculo oculto entre el Sisde y las Brigadas Rojas: un vínculo, en realidad, siempre negado por las investigaciones historiográficas y por los hallazgos procesales. Por lo contrario, la actividad judicial y las distintas comisiones de investigación determinaron que el Honorable Moro nunca ha estado secuestrado en las instalaciones de via Gradoli, que en cambio sirvió como base para dos brigadistas, Mario Moretti y Barbara Balzerani. La última Comisión Parlamentaria de Investigación sobre el caso Moro incluso llevó a cabo una investigación de DNA sobre los hallazgos secuestrados en el apartamento de via Gradoli, señalando la ausencia de rastros genéticos atribuibles a Aldo Moro.
Con respecto al episodio del alquiler en via Gradoli, hay que decir que han surgido unas claras evidencias en mas de una Corte de Assise. Parece correcto señalarlas, las enumeramos en estas pocas líneas:
- El ingeniero Borghi / Moretti alquiló el local en via Gradoli 96 siguiendo un anuncio normal en diciembre de 1975;
- Los propietarios eran Giancarlo Ferrero y Luciana Bozzi, propietarios del apartamento de la escritura en fecha 01/07/1974;
- Se constata que se trató de una transacción entre particulares, sin involucrar a la figura del administrador;
- El Sisde, el nuevo servicio secreto civil, fue creado en 1977, es decir, dos años después de la firma del contrato de arrendamiento de la base de las Brigadas Rojas.
- Es evidente que el contrato de arrendamiento entre las Brigadas Rojas y los cónyuges Ferrero no podía, por lo tanto, involucrarse con el Sisde, que en aquel entonces no existía.
- También hay que recordar que, como se sabe, la base de las Brigadas Rojas en via Gradoli 96 dejó de ser un “antro” en 1978, precisamente durante el secuestro de Moro.
- Para evitar contigüidades desmotivadas y engañosas, se debe enfatizar que la base de los Nar (formación neofascista) estaba en cambio en el número 65 en via Gradoli y en cualquier caso su estancia se remonta al1981. Otro extremista de derecha había vivido en via Gradoli 96 – Enrico Tomaselli de Tercera posición (formación neofascista), pero en 1986, muchos años después de los hechos en cuestión. En aras de la exhaustividad de los documentos, en todo caso conviene precisar que no se trataba de la misma habitación que ocupaban en ese momento las Brigadas Rojas. Finalmente, parece que no fue el administrador Catracchia, sino otro extremista de derecha, hijo de un magistrado de Casación que alquiló el estudio a Tomaselli: Andrea Insabato, propietario del pequeño apartamento y, además, futuro terrorrista en la sede del Manifiesto en diciembre del 2000.
- De toda forma las tres empresas inmobiliarias, propietarias de unos appartamentos presentes en los dos edificios del numero 96, han sido creadas antes del nacimiento del Sisde, por esa razon, no podian ser una emanación.
- En particular, estàn en las actas las propiedades inmobiliarias de Vincenzo Parisi, en 1978 comisario de Grosseto, desde 1980 en plantilla en el Sisde (del que se convierte en director en 1984) y en 1987 jefe de policía.
- La intensa actividad inmobiliaria del gerente de Parisi, con los apartamentos propiedad de sus hijas María Rosaria y Daniela, no parece recordar misterios ocultos. En todo caso, existen hechos notariales sobre el número 75 que se producen por primera vez un año y medio después del secuestro de Moro, mientras que los posteriores, relacionados con el número 96, se producen a mediados de los años 80: cuatro y nueve años después de la firma del 1975 contrato de arrendamiento por las Brigadas Rojas.
- En lo que respecta al edificio de via Gradoli, estas fechas no suelen ser comunicadas a los lectores. Por otro lado, en esta como en muchas otras ocasiones, la precisión de los tiempos cronológicos es necesaria para una interpretación ponderada de los hechos inspirada al método histórico. Un correcto análisis de los tiempos, las fuentes y el vínculo causa-efecto niega rotundamente cualquier posible participación de entidades no imputables a la lucha armada emprendida por las Brigadas Rojas en el lejano 1970. Por eso denunciamos el incumplimiento de los criterios más elementales de verdad y lógica en la reconstrucción. de hechos y circunstancias, una degeneración particularmente grave de y en la prensa italiana.
Matteo Antonio Albanese, Luca Altieri, Gianremo Armeni, Mario Ayala, Alessandro Barile, Andrea Brazzoduro, Edoardo Caizzi, Chantal Castiglione, Francesco Catastini, Frank Cimini, Marco Clementi, Andrea Colombo, Giovanna Cracco, Adriano D’Amico, Silvia De Bernardinis, Elisabetta Della Corte, Fabio De Nardis, Paolo De Nardis, Joshua Depaolis, Christian De Vito, Italo Di Sabato, Richard Drake, Nicola Erba, Eros Francescangeli, Marco Gabbas, Monica Galfré, Mario Gamba, Aldo Grandi, Massimiliano Griner, Marco Grispigni, Guillaume Guidon, Davide F. Jabes, Antonio Lenzi, Nicola Lofoco, Emilio Mentasti, Carla Mosca, Ottone Ovidi, Alberto Pantaloni, Paolo Persichetti, Giovanni Pietrangeli, Roberto Polito, Francesco Pota, Elena Pozzato, Alberto Prunetti, Nicola Rao, Tommaso Rebora, Susanna Roitman, Francesco Romeo, Ilenia Rossini, Elisa Santalena, Vladimiro Satta, Marco Scavino, Davide Serafino, Giuliano Spazzali, Chiara Stagno, Davide Steccanella, Andrea Tarturli, Ugo Maria Tassinari, Vincenzo Tessandori, Simón Vázquez, Luciano Villani
Roma, 12 de agosto de 2020 (actualizado el 1 de octubre 2020)
Versión original https://insorgenze.net/2020/08/17/basta-fake-news-sul-sequestro-moro-un-gruppo-di-storici-scrive-una-lettera-aperta-contro-le-dietrologie/
Quiénes son los 60 signatarios de la carta:
El discurso fue preparado por un gran grupo de historiadores y expertos, que durante mucho tiempo han estado involucrados en estudios históricamente relevantes sobre las Brigadas Rojas y otras formaciones de combate, más generalmente sobre los movimientos subversivos de la década de 1970. Aquí hay una breve información.
Matteo Antonio Albanese è ricercatore all’Università di Padova e autore del recentissimo volume “Tondini di ferro e bossoli di piombo. Una storia sociale delle Brigate rosse”(Pacini editore).
Luca Alteri, Sapienza Università di Roma e Istituto di Studi Politici “S. Pio V”. Sociologo, studia la questione urbana e la partecipazione politica non convenzionale.
Gianremo Armeni, sociologo, ha pubblicato diversi libri sulla lotta armata:“Questi fantasmi, il primo mistero del caso Moro” (Tra le righe libri), “Bi. Erre. I Fondatori” (Paesi Edizioni), “Buone regole. Il vademecum del brigatista” (Prospettiva Editrice), La strategia vincente del generale Dalla Chiesa contro le Brigate rosse (edizioni associate).
Mario Ayala, storico, professore associato Universidad Nacional de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur.
Alessandro Barile, ricercatore in Storia contemporanea, Sapienza università di Roma; redazione Zapruder.
Andrea Brazzoduro, ricercatore (autore del saggio “Soldati senza causa. Memorie della guerra d’Algeria”, Laterza), redazione “Storie in movimento/Zapruder”, rivista quadrimestrale di storia del conflitto sociale con cui collaborano oltre trecento storici.
Chantal Castiglione, scrittrice e studiosa dei movimenti sociali. Ha pubblicato “Tra speranze e illusioni l’Italia negli Anni di Piombo” (Falco Editore 2013) e “Canto per un ribelle. Lettere di lotta e disobbedienza” (Edizioni Erranti 2018).
Francesco Catastini, ricercatore all’Università di Padova. Tra i suoi libri “A ritroso. La ricerca storica e i suoi tempi” (Pacini).
Frank Cimini, cronista di giudiziaria, storico polemista a difesa dei movimenti degli anni Settanta, è stato il direttore responsabile di “Controinformazione”, di “Autonomia” e di “Sinopsis”, e ha fondato ed anima il sito giustiziami.it
Marco Clementi, professore associato di storia dell’Europa Orientale all’Università della Calabria, autore di numerosi saggi, tra cui “Storia del dissenso sovietico” (Odradek), “Gli ultimi ebrei di Rodi” (Derive Approdi), “La pazzia di Moro” (Mondadori), “Storia delle Brigate rosse” (Odradek). È coautore di “Brigate rosse, dalle fabbriche alla campagna di primavera” (Derive Approdi).
Andrea Colombo, ha seguito per molti anni sul Manifesto il caso Moro e ha scritto “Un affare di Stato, il delitto Moro quarant’anni dopo» (Cairo editore).
Silvia De Bernardinis, ricercatrice, ha scritto una tesi di dottorato su “Lotta di classe e lotta armata nella crisi fordista degli anni 70 in Italia: le Brigate Rosse”.
Elisabetta Della Corte, sociologa, docente università della Calabria.
Fabio de Nardis, professore associato di sociologia dei fenomeni politici, Università di Foggia e Università del Salento.
Paolo De Nardis, ordinario di Sociologia presso Sapienza Università di Roma, dirige l’Istituto di Studi Politici “S. Pio V”. Si occupa di mutamento sociale, teoria politica e pensiero marxista.
Joshua Depaolis, ricercatore indipendente, autore di «1978: a new stage in the class war? Selected documents on the Spring Campaign of the Red Brigades», (Kersplebedeb).
Christian De Vito, storico, ricercatore all’Università di Bonn, è autore di “Camosci e portachiavi” (Laterza), un saggio sulle carceri speciali.
Italo Di Sabato è tra i fondatori dell’Osservatorio sulla la Repressione, un organismo che dal 2007 coordina studi, ricerche, dibattiti e seminari sui temi della repressione, della legislazione speciale, della situazione carceraria.
Richard Drake, professore alla Lucile Speer Research Chair in Politics and History Department of History, University of Montana. È autore di “The Aldo Moro Murder Case” (Cambridge, Harvard UP), tradotto e pubblicato in Italia: “Il caso Aldo Moro” (Tropea).
Eros Francescangeli, ricercatore all’Università di Parma, ha pubblicato “Arditi del popolo: Argo Secondari e la prima organizzazione antifascista, 1917-1922” (Odradek), redazione“Storie in movimento/Zapruder”.
Marco Gabbas, Dottore di Ricerca in Storia, si è occupato dell’influenza del maoismo e del guevarismo sulla lotta armata in Italia.
Monica Galfrè, professore associato di Storia contemporanea, Università di Firenze. È autrice di “La guerra è finita. L’Italia e l’uscita dal terrorismo 1980-1987” (Laterza).
Mario Gamba, giornalista esperto di musica contemporanea, ha lavorato per il Manifesto, Alias, L’Espresso, Reporter, Outlet e il Tg3. Ha scritto una memorabile cronaca dei funerali di Prospero Gallinari e su Alfabeta2 ha pubblicato un intervento dal titolo “Memoria ed esorcismo”.
Aldo Grandi, giornalista e saggista, ha pubblicato numerose opere di ricostruzione storica. Tra queste: “Giangiacomo Feltrinelli, la dinastia, il rivoluzionario” (Dalai Editore); “Insurrezione armata” (Bur); “L’ultimo brigatista” (Bur); “La generazione degli anni perduti. Potere Operaio” (Einaudi).
Massimiliano Griner, storico, sceneggiatore, autore televisivo e radiofonico. Ha pubblicato numerosi saggi di storia contemporanea, tra cui “La Banda Koch” (Bollati Boringhieri) e “La zona grigia. Intellettuali, professori, giornalisti, avvocati, magistrati, operai. Una certa Italia idealista e rivoluzionaria” (Chiarelettere).
Marco Grispigni è uno studioso dei movimenti sociali e politici degli anni Sessanta e Settanta. Ha pubblicato diversi volumi: “Il Settantasette” (Il Saggiatore); “Elogio dell’estremismo. Storiografia e movimenti” (Manifestolibri); “Gli anni Settanta raccontati a ragazze e ragazzi” (Manifestolibri); “Quella sera a Milano era caldo. La stagione dei movimenti e la violenza politica” (Manifestolibri); “Il 1968 raccontato a ragazze e ragazzi” (Manifestolibri).
Guillaume Guidon, dottore in Storia Contemporanea all’Université Grenoble Alpes – Ricercatore indipendente
Davide F. Jabes, storico, ricercatore indipendente e consulente editoriale. È coautore di “Impero. The Axis Powers’ V-1 Carrying Capital Ship” (Fonthill).
Antonio Lenzi, PhD in storia dei partiti e dei movimenti politici, Università di Urbino.
Nicola Lofoco, giornalista specializzato in terrorismo italiano e internazionale, è autore di “Il caso Moro, misteri e segreti svelati” (Gelso Rosso). Collabora con Huffington Post e ha un proprio sito http://www.nicolalofoco.it
Emilio Mentasti, ricercatore indipendente, autore di “La Guardia rossa racconta. Storia del comitato operaio della Magneti Marelli” (Colibrì), “Senza tregua, storia dei comitati comunisti per il potere operaio 1975-1976”, (Colibrì), “Bergamo 1967-1980. Lotte, movimenti, organizzazioni”, (Colibrì).
Carla Mosca, ex giornalista Rai, ha seguito per il servizio pubblico le principali vicende giudiziarie connesse agli anni Settanta. Ha scritto, assieme a Rossana Rossanda e Mario Moretti, “Brigate Rosse, una storia italiana” (Oscar Mondadori).
Ottone Ovidi, ricercatore presso l’università Paris 10 Nanterre, fa parte della redazione di “Storie in movimento/Zapruder”.
Alberto Pantaloni, storico, editor della collana storica di DeriveApprodi.
Paolo Persichetti, già Br esule a Parigi, ha insegnato sociologia politica a Paris 8 Vincennes-Saint Dénis, è oggi ricercatore indipendente e autore del blog “Insorgenze.net”. Ha collaborato con Liberazione e Il Garantista. Con Oreste Scalzone ha scritto “Il nemico inconfessabile” (Odradek) ed è coautore di “Brigate rosse dalle fabbriche alla campagna di primavera” (Derive Approdi).
Giovanni Pietrangeli, ricercatore, redazione “Storie in movimento/Zapruder”.
Roberto Polito, storico dell’antichità, già ricercatore presso University of Cambridge ricercatore.
Francesco Pota, ricercatore, redazione “Storie in movimento/Zapruder”.
Alberto Prunetti, scrittore e traduttore, ha scritto numerosi libri, tra cui “Amianto, una storia operaia” (Edizioni Alegre) e “Nel girone dei bestemmiatori. Una commedia operaia” (Laterza). Fa parte di diverse redazioni, come Carmilla on line, Nuova Rivista Letteraria e Jacobin Italia.
Nicola Rao, giornalista e saggista, autore di diversi libri sulla storia del terrorismo di destra e di sinistra. Sulle Br ha pubblicato il volume “Colpo al cuore. Dai pentiti ai metodi speciali. Come lo Stato uccise le Br. La storia mai raccontata” (Sperling&Kupfer).
Tommaso Rebora, dottorando in Studi storici dal Medioevo all’età contemporanea, Università degli studi di Teramo.
Susanna Roitman ricercatrice e docente dell’Universidad Nacional de Villa María, Argentina. Direttrice dell’Osservatorio sul lavoro e conflitti di Cordoba.
Ilenia Rossini ricercatrice, redazione “Storie in movimento/Zapruder”.
Elisa Santalena, professore associato di Storia italiana contemporanea presso l’Université Grenoble Alpes, esperta di carcere speciale, è coautrice di “Brigate rosse dalle fabbriche alla campagna di primavera” (Derive Approdi).
Vladimiro Satta, già documentarista della Commissione Stragi, è autore di “Odissea nel caso Moro” (Edup), “Il caso Moro e i suoi falsi misteri” (Rubettino), “I nemici della Repubblica” (Rizzoli).
Marco Scavino è ricercatore di Storia contemporanea presso la Facoltà di Lettere e Filosofia dell’Università di Torino. Recentemente ha pubblicato “Potere operaio. La storia, la teoria, vol. 1” (DeriveApprodi).
Davide Serafino, ricercatore e insegnante, ha pubblicato “La lotta armata a Genova. Dal Gruppo 22 ottobre alle Brigate rosse”, 1969-1981”( Pacini).
Giuliano Spazzali, avvocato penalista, è stato uno dei principali esponenti del “Soccorso Rosso Militante”. Ha difeso gli anarchici del Circolo Ponte della Ghisolfa nella vicenda di Piazza Fontana, e successivamente anche numerosi protagonisti della lotta armata. Ha pubblicato il saggio “La zecca e il garbuglio” (Machina Libri).
Chiara Stagno, dottoranda in storia all’università Orientale di Napoli.
Davide Steccanella, avvocato penalista, poligrafo, ha all’attivo numerosi saggi tra i quali “Gli anni della lotta armata. Cronologia di una rivoluzione mancata” (Bietti Editore), “Le indomabili. Storie di donne rivoluzionarie” (Pagina Uno), “Le brigate Rosse e la lotta armata in Italia” (Narcissus.me). È autore anche del romanzo “Gli sfiorati” (Bietti), una narrazione autobiografica collocata a ridosso dei principali eventi sovversivi italiani. Ogni anno pubblica “L’Agenda Rivoluzionaria” (Mimesis), una cronologia quotidiana di ricorrenze riconducibili a figure e storie del Novecento ribelle.
Andrea Tanturli, archivista presso l’Archivio di Stato di Firenze.
Ugo Maria Tassinari, giornalista e insegnante, è stato lo storico fondatore del sito “Fascinazione” (dedicato all’estrema destra italiana) e oggi del blog AlterUgo. Ha scritto vari saggi e curato numerose pubblicazioni, tra cui “Biennio Rosso” di Oreste Scalzone (Sugarco) e “Evasioni. Melfi: operai in fuga dalla fabbrica penitenziario e altre storie” di Elisabetta Della Corte (Immaginapoli).
Vincenzo Tessandori, storica firma di La Stampa, ha scritto due libri sulla lotta armata degli anni Settanta, tra cui “Br. Imputazione: banda armata. Cronaca e documenti delle Brigate Rosse” (Baldini e Castoldi) e “Qui Br. Il racconto, le voci” (Baldini e Castoldi).
Luciano Villani, ricercatore di storia contemporanea, Università la Sapienza, Roma.
Aderiscono
Adriano D’Amico, avvocato, autore di «L‘occupazione Delle Terre. Una Grande Epopea Contadina», (Calabria letteraria editrice).
Edoardo Caizzi, edizioni Milieu.
Giovanna Cracco, direttrice della rivista Paginauno.
Nicola Erba, edizioni Milieu.
Elena Pozzato, edizioni Milieu.
Francesco Romeo, avvocato, si è occupato tra l’altro del processo che ha portato al riconoscimento delle torture contro Enrico Triaca, arrestato per appartenenza alle Brigate rosse nel maggio del 1978.
Simón Vázquez, Tigre de Paper edicions.